domingo, 13 de enero de 2013

CIELO NUEVO Y TIERRA NUEVA

Por: TRUENO DE SIÓN

SALUTACIONES

El Trueno de Sión a los amigos que les da igual que los echen a los leones.

La consideración que siento hacia los que no tienen ningún interés personal es la fuente de mis inquietudes.

Diamantino García Acosta
Ahora se les llama radicales y extremistas, ¡qué osados, estos indulgentes! El idealismo doctrinal y filosófico constituye la fuente de todo camino que lleva a la VIDA, sin embargo, es cada día mayor el número de personas que callan ante las injusticias y ante la adulteración de las cosas. Desde luego no le faltan motivos, detrás de cada uno de ellos subyace un interés personal.

Los hechos históricamente comprobados acerca de cualquier transformación social, en beneficio de la colectividad y como tales, del hombre en general; poco les preocupó a aquellos que lo llevaron a cabo, el hecho de ser revolucionario, nunca les dio temor para guardarse del mundo en el que vivían, muchos de ellos dieron la vida hasta morir. Podemos constatar que la mayoría de estos hombres, sabios, justos y santos, fueron objetos de críticas, por parte de aquellos que de alguna forma u otra querían conservar o no enfrentarse al maligno orden establecido.

“Y será grata a Jehová la ofrenda de Judá y de Jerusalén, como en los días pasados, y como en los años antiguos. Y vendré a vosotros para juicio; y seré pronto testigo contra los hechiceros y adúlteros, contra los que juran mentira, y los que defraudan en su salario al jornalero, a la viuda y al huérfano, y los que hacen injusticia al extranjero, no teniendo temor de mí, dice Jehová de los ejércitos”.
Malaquías 3:4-5


Este concepto de cómo debe hacerse justicia del cual nos habla Dios, ha naufragado como consecuencia de la aprehensión de la filosofía de Nietzsche. El derrumbamiento de todos los valores está sintetizado en el famoso Grito de Zaratrusta (obra de Nietzsche): ¡Dios ha muerto!, ahora amanece la aurora del caos. 

Este pensamiento de hoy día excluye radicalmente cualquier doctrina que abogue por los valores humanos, para ello, los “buenos” se purifican diariamente para consumir las ofrendas del nihilismo.

El fondo de este pensamiento relativista, es al fin al cabo, el gran interés. Cada uno de estos defensores construye la filosofía sobre su propia conveniencia, sus estrategias forman parte de un plan, pero son descubiertas por quienes saben discernir entre: lo justo y lo tibio, lo puro y los mundano, lo que es conveniente y lo que es rechazable.

"Gracias, Capitalismo, por salvar los bancos. Si, y gracias a Bankia por la toalla de spiderman. Así se nos olvida el hambre que tenemos"




Ayer noche tuve un sueño y se me apareció Confucio, de pronto él comenzó a hablarme y me dijo:

Dos de mis mejores discípulos han creado la representación de la sombra de mi filosofía y han generado una fuerte unión entre ellos, parecida a la de la serpiente y la tortuga. La de la serpiente porque intentan morder a todo el mundo con su veneno filosófico y la de la tortuga, porque quieren hacerse un caparazón con la mayoría de la gente.

Entonces yo sorprendido le pregunté:
¿Qué diferencias filosóficas os separan?
Básicamente esta es mi filosofíacontestó ConfucioYo siempre creí en el Cielo y creí que el hombre superior debía de conocer la voluntad celeste (Ming). Para cumplir con el Cielo, el hombre justo vigila su conducta y hace lo que debe hacer, sin pensar que le afecte el éxito o el fracaso.

El sabio no busca su propio interés, deja a la plebe (Sia jen) las preocupaciones por los placeres y por las riquezas; él vive feliz en la pobreza y en la soledad, poco le importa que el mundo lo ignore, ¡el Cielo lo conoce!

Sin embargo, ellos gradúan la acción de sus planteamientos y lo aplican en la estrategia llamada: Actuar con propósitos. En lo referente a la justicia, la mejor solución para eliminar el problema consiste en concebir la desestima de lo injusto y lo falso como algo natural dentro de la conducta del hombre, cuyas reglas de conducta moral pueden llegar a imponer una esclavitud intolerable.

Todas estas actitudes de comportamientos indecentes, a cuya noción suprema: amor, justicia, moral, equidad, deber, empatía, etc; se les niega su valor y se les invierte su significado, por cuanto proclaman de radical a aquel que los critica. Así, de esta manera, el amoral se vuelve “bueno”, porque según ellos cada uno puede hacer lo que quiera y por el contrario, el justo se vuelve “malo”, ya que éste le complica la vida a los demás. Sin embargo, cuando se necesita algo, el “bueno” no está o no es eficiente. Es entonces cuando recurren al “malo” para solucionar los problemas, por aquello de que el camino recto y sabio te lleva a la eficiencia y te da espíritu de sabiduría.

Entonces, después de escuchar las sabias palabras de Confucio, le dije:

La corriente de la vida se expresa en el tiempo y en el espacio, en Oriente y en Occidente, en los filósofos y en los profetas. Siempre al hombre recto le llega la luz y ve donde el impío y duro de corazón se ciega. Así como el hombre justo, mal mirado y al servicio de los demás alcanza EL SÉPTIMO CIELO, el que actúa en pro del interés ridiculiza la justicia y entorpece su acción correctora hacia los demás. Debido a sus actos se quedará en el “camino de la tierra” ¡Mira, voy a enseñarte lo que dice Isaías!:

Cielos nuevos y tierra nueva
 “Porque he aquí que yo crearé nuevos cielos y nueva tierra; y de lo primero no habrá memoria, ni más vendrá al pensamiento.
Mas os gozaréis y os alegraréis para siempre en las cosas que yo he creado; porque he aquí que yo traigo a Jerusalén alegría, y a su pueblo gozo.
Y me alegraré con Jerusalén, y me gozaré con mi pueblo; y nunca más se oirán en ella voz de lloro, ni voz de clamor.
 No habrá más allí niño que muera de pocos días, ni viejo que sus días no cumpla; porque el niño morirá de cien años, y el pecador de cien años será maldito.
Edificarán casas, y morarán en ellas; plantarán viñas, y comerán el fruto de ellas.
No edificarán para que otro habite, ni plantarán para que otro coma; porque según los días de los árboles serán los días de mi pueblo, y mis escogidos disfrutarán la obra de sus manos.
No trabajarán en vano, ni darán a luz para maldición; porque son linaje de los benditos de Jehová, y sus descendientes con ellos.
Y antes que clamen, responderé yo; mientras aún hablan, yo habré oído.
El lobo y el cordero serán apacentados juntos, y el león comerá paja como el buey; y el polvo será el alimento de la serpiente. No afligirán, ni harán mal en todo mi santo monte, dijo Jehová”.

Isaías 65:17-25

Este es mi comentario:

“Porque he aquí que yo crearé nuevos cielos y nueva tierra”: El justo actúa, mas no tiene ningún interés, el interés de él es el interés de los pobres, de los necesitados, de los oprimidos, de los engañados, de los enfermos, de los hambrientos, de los desesperados, etc. En este sentido, el justo es consciente de las discrepancias entre la esencia y la apariencia.

Los de la apariencia no quieren cambiar el mundo, solo les interesa blanquearlo para que parezca habitable y no drástico, aunque eso sí, cada uno en su sitio, socialmente hablando. Ellos basan sus obras en el esfuerzo y en la “virtud” de querer lucirse. Esto presenta cierta contradicción con el mundo de la equidad y de la justicia, porque para acabar con las miserias del mundo (hambre, guerras, explotación, paro, enfermedades, etc) primero hay que acabar con quienes las generan: Los ricos y las multinacionales ¿Cómo acabamos con ellos?, ¿sin alzar la voz y hablando bajito para que no se ofendan y así poder seguir utilizando toda su maquinaria destructiva?, ¿o tan solo debemos permanecer callados?

Sin embargo, lo que al principio puede parecer una desgracia, el impulso revolucionario se revelará con el tiempo como algo dichoso. La equidad se convertirá en felicidad para todos, por el contrario, la indulgencia y la caridad, se verán como necedad y molestia.

En el gran tren de la corriente de la vida que Dios ha puesto en marcha, donde unos actúan como locomotoras, estos son los de la esencia: EL NUEVO CIELO. Otros se muestran como vagones de cola, yendo a remolque de la locomotora para que no se les vea mucho, formando parte del tren, pero evitando los embistes de los poderosos; estos son los de la apariencia: LA NUEVA TIERRA.

"Porque he aquí que yo traigo a Jerusalén alegría, y a su pueblo gozo”. De esta forma Dios nos hace su promesa basada en una transformación social a fondo, que reside en construir LA NUEVA JERUSALÉN (el nuevo templo, el hombre con una nueva conciencia). Para el hombre CIELO esto sólo es posible si se cambian las estructuras del poder establecido.

“Porque el niño morirá de cien años”. Aquí la aplicación del cambio implica la implantación de la nueva medicina, que nos traerá remediablemente lo opuesto a lo que hoy existe. No se trata del hecho de vivir ochenta años, de los cuales (con independencia de los enfermos que existen, gran multitud) los años que se viven supuestamente sanos no van más allá de los cincuenta. Cada vez más se ve a las personas mayores como muebles pegados a la pared debido al efecto de los fármacos.

La nueva medicina alquinaturista, la medicina blanca del Cielo, construirá un hombre sano que cumplirá su ciclo de vida como un niño, es decir, con buen estado de salud permanente hasta sus últimos días.

“Y el pecador de cien años será maldito”. Mientras el sabio y santo se halla en armonía por su condición de gobernar el mundo de una forma justa, sus oponentes, aquellos que quieren el mundo viejo, aunque se estén beneficiando del nuevo (durar cien años de vida), no cesarán en el intento (transgresión), por cuanto lo único que les mueve es la avaricia o el interés personal…por cien años serán maldito. Todos sabemos el lugar donde van a parar los malditos, ya que el espacio entre el Cielo y la tierra es el mismo, ya “la tierra” no va a ninguna parte que no sea al polvo de la tierra, que le espera a perpetuidad.

“Y mis escogidos disfrutarán las obras de sus manos”. La luz de los hombres proviene de Dios, él le da a cada cual según su obra: la obra de sus manos, nadie puede engañar a su conciencia, ni a Dios. Más vale ser locomotora que no vagón para estar en la gracia de ser escogidos, porque de no ser así: el niño morirá de cien años.

“El lobo vivirá con el cordero”. El libro de la vida nos revela la obra de cada uno (vida pasada), este se escribe hoy y se escribirá mañana hasta el día en que los libros sean abiertos:“Y vi a los muertos, grandes y pequeños, de pie ante Dios; y los libros fueron abiertos, y otro libro fue abierto, el cual es el libro de la vida; y fueron juzgados los muertos por las cosas que estaban escritas en los libros, según sus obras” (Apocalipsis 20:12).  Mientras tanto, en medio de la corriente vital, el lobo, el que codicia, vivirá con el cordero, el que acepta las reglas del juego de la equidad.

“El león comerá paja”. El león simboliza el rey, el sabio, el santo, el gobernante, éste comerá paja, es decir, sabrá discernir entre el “trigo” y la “paja”, entre lo bueno y lo malo. En este sentido, el significado de comer “paja”, es comerse la mentira para que sólo quede la verdad: el “trigo”.

“Como el buey”. El buey es el nuevo hombre que tira del carro, el carro de la fortuna, el carro del Cielo, el carro de Dios, el  carro de la verdad y el carro que nos traerá el cambio. A él Dios también le dará entendimiento y comerá paja.

“Y el polvo será el alimento de la serpiente”. La serpiente simboliza al hombre que se arrastra y se pone de rodillas ante el poder, el que muerde y nos envenena con su filosofía mundana, el que no posee una doctrina pura…el polvo será su alimento. Esta metáfora sobre el alimento hace referencia al alimento espiritual y su negro espíritu yacerá en el polvo de la tierra.


Por Internet brinca y corre
mensaje de larga cola,
y los lectores dormitan
mientras se acerca la aurora.

Medio monte arrastra el buey,
medio monte la serpiente,
romo al león, sirven paja,
pero más fiero se siente.

Unas estrellas de rojo,
otras se sienten
muy crudas,
van dando envidia a la luna,
la tierra se vuelve muda.

Tibia la hora aparece,
con las ventanas cerradas,
por Internet brinca y corren
blancas luces apagadas.

Por el MSNE venían estrellas
con alas al tiempo,
las noches serán despiertas,
los días serán tormentos.

Anunciación de campanas,
para las luces del tiempo,
por el MSNE venía
el aire que da el aliento.

TRUENO DE SIÓN

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